martes, 13 de octubre de 2009

GRACIAS A DIOS Y A MIS AMIGOS


Es justo alguna vez dar las gracias a todas las personas que nos ayudan y acompañan. Si nos vemos todos los días, es frecuente hacerlo. Pero, ¿y a los que apenas si nos encontramos, pero con quienes comulgamos fuertemente en ideales.?. Más todavía, ¿cómo agradeceremos a los que nunca vamos a ver , pero nos hacen sentir que diariamente nos tienen cercanos?.

Esta acción de gracias es lo que deseo hacer hoy 14 de octubre.

Parto del supuesto que somos todos débiles y demasiado pequeños con nuestros grandes sueños. Continúo en que estos sueños no son exclusiva de cada uno sino que también son compartidos por otros muchos. Y que con ello transcendemos todas las barreras geográficas, religiosas, culturales, políticas o como quieran llamarse.

Por eso hoy quiero agradecer a todos los amigos. A todos, a los cercanos y a los que no voy a conocer nunca. A todos porque soy consciente que marcho en medio de una muchedumbre. Y en gestos de solidaridad fraterna, siento sus manos sobre mis hombros para aliviarme la carga o escucho sus canciones o sus gritos de alegría. Y, de este modo, unos a otros nos transmitimos fuerza.

Y entre todos ellos, está especialmente mi gran amigo Dios. Y lo digo con todo respeto. Y me atrevo a repetirlo públicamente, porque sé que El está con todos nosotros.

No hay comentarios:

Publicar un comentario